La Nación Mapuche y la Nación Guanche han sido castigadas por la Historia y condenadas a vivir sometidas y colonizadas, diariamente tienen que soportar los ataques de los pueblos invasores y comprobar cómo se destruye su identidad. Se les ha hecho creer que sus pueblos han desaparecido, que no tienen razón de ser en la historia de la humanidad. Miguel, un mapuche amante de la libertad y conocedor de ambas naciones, narra sus vivencias, sus experiencias e, incluso, sus desencantos a un lado y otro del Atlántico, para concluir, después de aportar múltiples pruebas, que tanto el pueblo mapuche como el pueblo guanche VIVEN y que el triste infortunio histórico no les puede quitar el legítimo derecho a ser libres, a constituirse como estados, a tener sus derechos como cualquier otro pueblo de este planeta y a que, algún día, la bandera de sus naciones pueda ondear en la ONU como estados libres.
Un análisis estremecedor y contundente se realiza en las páginas de este libro, donde el autor navega por la Nación Mapuche y por la Nación Guanche, dejando clara evidencia de una realidad que solo los invasores pretenden ocultar.