Relatos de quéséyo

Las pequeñas historias que se cuentan en «Relatos de quéséyo» son todas inéditas, intemporales y equidistantes. Historias que han sido escritas durante los años del 2001/2012, según esporádicamente el autor se sentía atraído por las musas de la inspiración. Puede que en algunos de los relatos el subconsciente le haya jugado alguna mala pasada al autor, y se haya colado en el texto algún rejo de rebeldía propia, que a simple vista carece de base científica, aunque se advierte al lector/a que cualquier coincidencia con vivencias en primera persona o terceros, es fruto de una malvada conciencia.
Es cierto que en algún momento, y no sabe el autor determinar en qué historia se produce y la extensión que ocupa, la influencia Kafkiana por la que el autor siente verdadera admiración, haya tenido su manifestación. Otros grandes escritores influyentes en el estilo y léxico empleado en «Relatos de quéséyo» son Gabriel García Márquez, sobre todo en la transformación mágica de lo cotidiano al alcance de cualquier ser humano. Y sin ningún género de dudas, es Benito Pérez Galdós el que con mayor fuerza entra en el estilo del autor, de manera particular cuando te hace sentir la muerte en batallas, o el olor a pólvora de los cañonazos en Trafalgar.
Cuándo se le pregunta al autor lo que espera de esta obra, no se lo piensa dos veces: convertir «Relatos de quéséyo» en las mejores historias canarias de todos los tiempos.