Amelia huye de su marido para salvar la vida. Se refugia en una casa de donde no se atreve a salir, pues teme perder la protección de aquellas paredes. Allí se lamenta amargamente por lo que ella considera sus fracasos: se ha visto obligada a confiar el cuidado de sus hijos a otra familia, ha abandonado su trabajo, su matrimonio está roto...
Sin embargo, en aquella aldea escondida donde se oculta, Amelia hallará a otra mujer que ha sufrido mucho y que le ayudará a recobrar su autoestima, su fuerza y su valor para afrontar todos sus problemas.