Testigo mudo. El reloj

Los actos fijados para la celebración del día mayor de las fiestas fueron interrumpidos inesperadamente, una chica muy popular en el pueblo había desaparecido, lo que hizo necesario formar grupos de vecinos en su busca, en el amanecer se encontró su cuerpo flotando en el mar.
Esta situación puso en movimiento la maquinaria judicial, sin que los investigadores llamados al efecto brindaran resultado.
Frustración recordada aun cuarenta años más tarde, y que sorprendentemente obtiene la debida respuesta en la postrimería de la vida profesional del abogado de la víctima, cuando éste recibe una carta manuscrita del único sujeto que había sido objeto de retención policial en fase de investigación.
Hecho considerado hiriente por el comportamiento egoísta de los sujetos e incluso cuatro décadas más tarde de que el hecho hubiera acontecido.