En este estudio, merecedor del Premio de Investigación Viera y Clavijo 2004 (modalidad de Ciencias Sociales), se procede a definir y analizar los hechos y factores que han venido induciendo a la declaración de áreas protegidas en Canarias por parte de la Administración, descubriendo en qué medida los modos de implementación territorial están definidos por la organización administrativa y competencial del Archipiélago y, sobre todo, por las situaciones estructurales de la economía regional. El autor enfatiza en la concepción de las áreas protegidas como productos artificiales sociales de institucionalización del espacio geográfico, que derivan de una decisión técnica-política de actuación pública, pero que resultan en realidad de una expresión espacial de la política económica, social, cultural y ecológica de la sociedad.