El esfuerzo y los recursos empleados para defender la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria a lo largo de toda su historia, siempre fueron mayores de lo que tradicionalmente se ha venido creyendo. Ese esfuerzo ha dejado como legado un patrimonio de construcciones defensivas, algunas restauradas y conservadas con mayor o menor acierto, y otras en total abandono o ya desaparecidas. Este libro sostiene que la artillería –y más concretamente la de costa– fue, junto a las milicias y la voluntad popular, la defensa principal con la que contaron las Islas durante más de cuatro siglos. Los avances técnicos a partir de la II Guerra Mundial, y el empleo de medios y materiales más versátiles y polivalentes, así como la acción conjunta de todas las Armas –terrestres, marítimas y aéreas– hizo que la artillería de costa, que tuvo un gran protagonismo hasta mediados del siglo XX, quedara obsoleta y acabara por desaparecer. La intención del autor es contribuir a explicar y difundir el papel determinante de la artillería de costa tuvo en la defensa de las Islas Canarias.