Poema escénico o teatro de la poesía, Así que pasen cincuenta años es una ceremonia de evocación a Lorca escrita en el cincuenta aniversario de su muerte. Texto que se escribe a sí mismo desde la impregnación lorquiana, en sus imágenes y visiones se convoca la trama secreta de las palabras en un universo de resonancias y ecos cómplices. Por su parte, Los ciegos indaga en los aspectos racionales e irracionales que conforman la personalidad humana, teniendo como referente la obra de Ernesto Sábato. En estas dos piezas la escritura dramática participa de la condición poética y ensayística, nutriéndose del universo simbólico de ambos autores.