Los relatos que componen esta obra representan la parte más importante de la producción literaria de Antonio Bermejo y muestran el universo literario de este autor. Desde el afán por lo hermoso, o más bien el rechazo de lo feo, a la preocupación por lo común, pasando por el individuo aislado que se siente herido, demasiado profundamente, por el choque con algún otro o con los demás. El individuo bermejiano se transforma entonces en una viviente llaga, y ella ni cicatriza ni al parecer tiene salvación. Unos personajes que se plantean desde su subjetividad medir su conciencia con una realidad misteriosa que sólo se muestra en apariencia…